El intendente Luis Ampuero anunció con ferviente entusiasmo la buena nueva al indicar que el procesamiento de ese recurso brindará más estabilidad laboral a los empleados de la planta hasta ahora dedicada a la elaboración de los clásicos bastoncitos Kani Kama. “La empresa tiene puntos de producción altos y bajos, hay una falta de equilibrio. Sin embargo, encuentro muy positivo la búsqueda de una línea de trabajo distinta con el langostino, producto que se sumaría al kanikama”, destacó el intendente tras una charla mantenida con Pott “Es un paso positivo”, continuó, “la gente puede seguir manteniendo la fuente laboral y no depender de un solo producto que, aunque es autóctono, no termina de producirle una sensación de tranquilidad laboral a la población”. “Si una empresa de estas puede trabajar con otros productos, se llevará tranquilidad a los propios trabajadores y a la comunidad”, reflexionó Ampuero, aunque nada dijo de la deuda millonaria que el empresario mantiene con el municipio por un salvataje que hace algunos años le hizo la provincia.