En diálogo con FM Tiempo dijo estar dispuesto “a un arreglo económico para que se desvinculen de la empresa y que hagan su vida, pero no puedo tener gente en la empresa que no trabaje, habiendo detrás mucha gente que quiere entrar a trabajar, o seguir manteniendo esta gente y que siga viviendo de esta forma, no estoy de acuerdo, no va a pasar”. Entre los despedidos hay personas con “900 días de parte de accidente, es increíble, a esa gente no la voy a reincorporar a la empresa para que siga con parte de accidente y siga cobrando; por eso no se quieren ir, porque cobran dinero todos los meses sin hacer nada”. El titular de Conarpesa afirmó que “si la condición sine qua non de este grupo de doce es que sean incorporados, y si no, no hay otra solución, no habrá otra solución. Estoy dispuesto a un arreglo económico, pero nunca volver a hablar en la empresa”. Consultado sobre las presiones a los representantes para firmar la reincorporación, Álvarez Castellano no dio detalles. “Es típico, casi normal que en las conciliaciones exista un ambiente tenso, porque por parte de los sindicalistas y de los afectados, quieren defender sus derechos y la empresa tiene los suyos también, eso es normal”. Pero este caso “desde que empezó el conflicto fue siempre bastante tenso y siempre con muchas amenazas por todos lados y con denuncias en fiscalía”. El empresario afirmó que “lo que más me molesta es que sea contra empleados, que lo único que hacen es recibir órdenes mías y el responsable soy yo. Se la toman con ellos pero hubo muchos casos de venirme a hablar con temas específicos y los obligué a denunciar”. El presidente de Conarpesa aseguró que muchos de los representantes de su firma “tienen miedo, no quieren enfrentamiento, porque viven en Madryn” y expresó que “no creo que haya que llegar a eso, si la empresa no quiere a una persona por motivos justificados y encima ofrezco acuerdo económico, no entiendo porqué tenemos que estar con esta tensión”. “Las extorsiones de este tipo no me afectan mucho, llevo 20 años y pasé por muchas situaciones feas y si tengo que seguir pasándolas desgraciadamente después de tanto tiempo, pues las voy a tener que seguir pasando, pero no las voy a aceptar”, advirtió. Afirmó que Conarpesa tiene más de mil empleados: “Tengo que cuidar a los mil menos estos doce, por respeto a ellos no voy a aceptar que me extorsionen para tener esa gente adentro”. (Diario Jornada)