El dirigente a ATE, Carlos Garzón denunció que una trabajadora de la Delegación de Pesca de Caleta Olivia es desde hace varios días víctima de violencia laboral y psicológica por parte de empleados de esa repartición por lo que solicitó con carácter urgente una audiencia con el subsecretario de Pesca, Alexis Quintana, (foto), “para que intervenga ante la dramática situación”. “Desde nuestro gremio le cursamos una nota a Quintana para que de una respuesta por la violencia laboral de la que es objeto nuestra compañera Silvana Simino, y si no hay una devolución por parte de este funcionario lo haremos responsable por lo que pueda ocurrirle”, indicó el dirigente en dialogo con Mar&Pesca. Garzón detalló que Simino es víctima de lo que en psicología se conoce como Mobbing, vocablo ingles que se utiliza para denominar la violencia laboral extrema que provoca serios trastornos en quienes la padecen. Al describir la serie de episodios tremendos que a diario vive la trabajadora, Garzón contó que Simino es aislada por sus compañeros y jefes y que inclusive se le modificó la clave que utiliza en la computadora para cargar los partes de pesca “en un claro intento de coartándole así la libertad de trabajo”, puntualizó. A raíz de estos episodios, el gremialista explicó que ayer se sumó un nuevo incidente ante la negativa por parte del personal de recibirle un certificado extendido por un especialista médico donde se le diagnostica estrés como consecuencia del maltrato laboral del que es objeto. “Es una situación muy compleja y por eso pedimos una audiencia para hablar con Quintana y si no está en sus manos resolverlo pediremos hablar con el ministro de la Producción Leonardo Álvarez pero esta situación no puede continuar, y el límite es la salud de nuestra compañera”, finalizo el gremialista. Si bien Garzón evitó brindar datos sobre las personas que estarían acosando a Simino, trascendió que una de ellas sería la delegada de la Oficina de Pesca Provincia de Caleta Olivia y actual pareja del empresario de la merluza Luis Jones. En ese sentido, fuentes allegadas a la Subsecretaría de Pesca con sede en Río Gallegos detallaron que la mujer habría accedido  a ese puesto por la entrañable amistad que mantiene  Quintana con el operador  de banquina chica.