El ex gerente de la recordada Cámara Langostinera Patagónica (CALAPA), Ernesto Azpillaga, falleció este sábado en la ciudad de Buenos Aires víctima de una larga enfermedad. Había nacido en Comodoro Rivadavia hace 65 años y tenía más de media vida en la pesca. Durante casi una década se desempeñó como ejecutivo de Conarpesa y luego trabajó como consultor de negocios para varias empresas pesqueras del país y del exterior. En enero había cumplido años y lo había pasado muy feliz junto a su familia, pero hace unos días tuvo una recaída y ya no pudo recuperase. “Se fue un hermano de la vida, un generador de proyectos, un amigo y sobre todo un gran ser humano”, señaló conmovido, el ex gerente de Pesquera Santa Cruz Darío Baroli. Dueño de una gran vocación para el diálogo y una calidez innata, Azpillaga fue requerido en varias oportunidades para destrabar distintos conflictos pesqueros. Era amiguero, de trato sencillo y fanático del fútbol. También le gustaba el campo y le brillaban los ojos cuando hablaba de la Patagonia, su lugar en el mundo. “Se fue un grande del rubro, alguien que marcó una diferencia y un estilo”, (un controvertido con códigos). Simplemente un recuerdo sincero y un silencio eterno. ¡Buen viaje querido y estimado Maestro!, twitteó, el director Ejecutivo de Argenova, Mauro Zamboni ni bien se conoció la noticia de su muerte. Allegados a la familia informaron que no habrá velatorio en la ciudad de Buenos Aires, sus restos serán trasladados en avión este martes a la mañana a la ciudad de Comodoro Rivadavia, y en horas de la tarde, tras una ceremonia religiosa serán enterrados en un cementerio de esa ciudad donde también reposan su padre y su hermano.